Tras un mes de parón “obligado”, vuelve la nuMorada. En homenaje al último escrito, fechado el 6 de Abril, vamos a analizar el número 6. Un número que equilibrará la tardanza y dará armonía al tiempo esperado.
El número 6 es considerado el número del orden, representa la codificación y por ello el derecho y la justicia, buscando el equilibrio entre los extremos de la balanza. Este equilibrio se observa en la búsqueda de la armonía en el hogar a través del matrimonio y el apoyo en la familia y amigos.
El Karma, como esa energía trascendente que se deriva de los actos de las personas, comienza en el número 6 y se recoge en el número 8. Tomando ese carácter de equilibrio en la vibración del número 6.
El número 6 es uno de los denominados números perfectos, ya que sus múltiplos al ser sumado nos dan el mismo 6 (1+2+3=6). Esto explica la búsqueda de la continuidad y la armonía del número 6.
Su significado de equilibrio se demuestra ya que se puede obtener de la suma repetida de sus múltiplos. 1+1+1+1+1+1=2+2+2=3+3=6.
Todo esto nos resalta el gran poder armónico y equilibrado que posee el número 6.
Los nacidos bajo el número 6 son personas serenas, equilibradas, prudentes y sensatas. Los números 6 suelen ser personas queridas y admiradas, con facilidad para hacer amigos. Esto se debe a que su personalidad les facilita crear un ambiente de paz y equilibrio en cualquier situación. Llegando incluso a ser buenos consejeros y apoyos para las personas que lo necesitan. Casi siempre se toman la vida con calma y no solo se conforman, sino que desean vivir en paz, rodeados de sus seres queridos.
Tienen un lado sensible, romántico e idealista. Esto les hacer ser personas vulnerables a las adversidades que se puedan encontrar. Cuando escogen un amigo, su confianza es total, aunque si por alguna causa se sienten defraudados, sufren terriblemente al descubrir el engaño. Aquí entra en juego su practicidad, que les facilita salir airosos, tomando siempre decisiones justas.
Los números 6 son personas sibaritas y muy exigentes consigo mismos, algo que se puede volver en su contra. A los números 6 les gusta vestir bien, comer bien y vivir confortablemente.
En el aspecto laboral son personas que podrían alcanzar el éxito, pero su pereza, indecisión o comodidad les hace no lograrlo en ocasiones. No les gusta enfrentarse a los problemas y casi siempre siguen el camino más cómodo. También tienen un carácter tímido bastante desarrollado, aunque cuando se encuentran cómodos son personas muy habladoras, llegando incluso a acaparar las conversaciones dentro de una reunión.
Esa timidez también les hace ser personas que guardan “sus verdades” si no se encuentran con personas de absoluta confianza.
Como aspecto negativo, los números 6 pueden llegar a ser personas muy celosas y posesivas. Llegando a cerrarse en sí mismo y siendo poco flexibles hacia las personas que tratan de proteger, llegando a ser agobiantes.
Si la parte negativa se apodera de los números 6 tenderán a ser pesimistas, sobre todo en aspectos sentimentales. Aunque en temas de enfermedades también alcanzan estos extremos, siendo personas de marcado carácter hipocondríaco.
Los marcados por la vibración del número 6 tenderán a trabajar en campos que busquen el equilibrio y la armonía. Serían buenos pintores, escultores, bailarines, músicos. También en campos científicos como la medicina, psiquiatría, psicología y la educación en general. Dado su carácter afable y su facilidad de oratoria, son buenos consejeros y predicadores.
El número 6 ha aparecido a lo largo de la historia con cierta frecuencia. El número 6 es considerado el número del hombre, porque el hombre fue creado el sexto día de la creación. En Ezequiel el hombre se representa con dos “cañas”, en la Biblia una “caña” es una unidad de medida que equivale a 3 metros. Siendo ésta alta en apariencia y vacía en el interior, como el hombre.
Jesús realizó su primer milagro en Caná (lugar de cañas), convirtiendo el agua que había en 6 tinajas en vino. Aquí se representa al hombre como esas tinajas llenas de agua que, gracias a Jesús, adquieren valor convirtiéndose en vino. Dios trabajó 6 días, descansando el séptimo, por ello es considerado el número del trabajo.
También aparece en más partes de la Biblia como medidas perfectas, “seis tribulaciones, “seis medidas de cebadas”… denotando su carácter de equilibrio.
Por tanto, si sois personas salpicadas por la vibración del número 6, mantened ese equilibrio y la búsqueda de la armonía. Y si no lo sois, tratar de hacerlo también por el bien de todos.
Aquí finaliza una nueva entrega de la nuMorada, dónde los números dejan de ser solo números. Si no es tu número tranquilo, que llegará tu turno. Te esperamos la semana que viene.
ÁS_FdN
el guerrero says
19 mayo, 2011 at 10:58Cuando has dicho lo de la Biblia y que se representa al hombre con dos cañas, me he acordado de que a ti en La Mrada se te representa, no con una caña, sino con una jarra…¿Eso son «6» metros,no?
Bromas a parte y usando terminología de tu propio post, te daré como nota un 6, ya que es símbolo de equilibrio y una medida perfecta. ¿Medida perfecta?¿Eso no era a partir de 20cm?…Como diría tú,quizás…
el filosofo says
19 mayo, 2011 at 13:52Dos cañas, una jarra???? no controlo esas medidas ya que últimamente soy más de botellines!! jajaja
Gracias por tu 6, me alegro. La semana que viene iré a por el 7…quizás!
Lo de 20 no se de que me hablas… jajaja!