Mi complemento… Así como la Luna complementa al Sol para darnos cada día. Como el yin no es nada sin el yang. Así como el lado izquierdo complementa al derecho. Como la luz nos guía en la oscuridad. Así como la mente complementa el cuerpo. Como el sexo femenino necesita al masculino para dar vida. Así como el rojo es el complementario del verde… Mi complemento perfecto eres tú.
El destino nos cruzó en nuestros caminos para que nos complementáramos. Sin ser mi polo completamente opuesto, tienes muchas cosas de las que carezco. Yo, a su vez, aporto la esencia que necesitas para terminar de ser feliz. Tú tienes la fuerza que a mí me falta, sin embargo en ocasiones no hay cabida para ella y yo te proporciono la habilidad necesaria para resolver el problema. Tú consigues disipar mis dudas mientras yo aclaro las tuyas. Aportas la extroversión con la que no cuento y me ayudas a vencer cada vez más mi timidez. Yo calmo tu rebeldía dándote la paciencia y la estrategia ante la batalla.
Pero, como no puede ser de otro modo, como en el yin hay yang y en el yang hay yin, nuestras vidas no pueden ser completamente opuestas. Yo no puedo odiar todo lo que tú amas, del mismo modo que tú no puedes despreciar lo que yo estimo. Ambos compartimos mismos gustos en multitud de aspectos y tenemos el respeto suficiente para sobrellevar juntos el deseo que sólo satisface plenamente a una de las dos partes. Juntos somos un todo, separados…no puedo decir que seamos nada pero sí una parte incompleta. A mí me faltaría escuchar esa risa que sólo tú sabes provocar, tal vez no asomaría en mi rostro las muecas de reproche que hago cuando dices algo indebido, no escucharía mis pensamientos antes de abrir mi boca como cuando sabes lo que voy a decir con sólo formar con mis labios la primera letra. Y a ti, te faltaría…bueno, sólo tú puedes saber eso. Porque si somos buenos complementarios, de la misma forma que yo sé que te necesito, espero que tú tengas claro cuánto me necesitas a mí.
Lo tremendo de todo este escrito es que me doy por aludido desde el segundo uno. No dudes, que no lo haces…, que yo te necesito, me haces falta amiga mía, porque sin ti…todo anda mal!!!
Te quiero complemento. Un beso.