Jornada número 12 de Liga, aunque partido número 11, en la que tu/mi/nuestro Sevilla visitaba las Islas Baleares con el objetivo de remontar el vuelo tras los dos últimos tropiezos en el Ramón Sánchez-Pizjuán. Enfrente un equipo en la mitad baja de la tabla, con una crisis institucional enorme y con un Joaquín Caparrós que llega a modo de salvador y con la misión de “reestructurar” el club.
El partido empezaba con retraso, problemas de Rakitic con la equipación, y con los nuestros con las medias rojas. Sin delantero referencia, con tres medios y con Navas y Armenteros por las bandas.
Con esto el Sevilla empezaba dominando el encuentro, mucha posesión de balón y aproximaciones al área rival. Cuatro saques de esquina en los primeros siete minutos dan muestra de ello.
Atrás con solvencia defensiva, con Spahic incluso sacando el balón jugado y comenzando jugadas de ataque. Tanto en balones largos buscando a Manu como enganchando con los medios. Una pena que Navas no esté, o que cuando está tenga siempre a dos rivales encima.
La jugada más peligrosa fue una de Manu, que tras regatear al rival cae en el área. Nada punible. El problema de jugar sin un “9” de referencia es que cuando el delantero “centro”, Manu, cae a banda y centra… ¿quién remata? No hay nadie y el segundo punta al ser un mediocentro no aparece y por tanto no hay peligro.
Sin mucho más se llega al descanso del partido, con un Sevilla que comenzó bien pero que fue desapareciendo a lo largo del partido.
Y en la reanudación no mejora nada, llegando incluso a empeorar la situación. Es el Mallorca el que empieza a poner en peligro la portería de Varas. Sobre todo a balón parado. El canterano, que no se le vio en la primera mitad, empieza poco a poco a ser centro de atención, junto a Spahic y SQD. Mala señal.
Arriba solo llegábamos tímidamente, con sendos remates altos de Navas y Trocho de falta. Pero sin peligro.
Y con el carrusel de cambios, no mejoró la cosa. Campaña entraba por Rakitic (¿por qué esas dimensiones de la publicidad solo en su camiseta?) y minutos más tardes era Trocho el que dejaba su puesto por Luis Alberto.
El Mallorca seguía dominando y el Sevilla solo trataba de salir a la contra. En una de ella un centro de Manu era rematado por Armenteros fuera. Un pena.
Y los fallos arriba se contagiaban a la defensa. SQD no despeja un balón fácil y casi están a punto de marcarnos. Menos mal que el ex-sevillista remató alto.
Cómo no tuvo que aparecer Varas a la parada del partido, esta vez doble. Primero despeja a córner un balón que se envenenaba y tras el córner despeja un mano a mano tras fallo defensivo.
El equipo estaba sin rumbo, había que decidir tratar de ganar o tratar de no perder. Y Marcelino prefirió amarrar el empate metiendo a Fazio por Medel, dejando al único delantero que teníamos en el banquillo.
Y cosas del fútbol, en los últimos minutos tuvimos las ocasiones más claras. Navas remata desde el área cuando había dos compañeros esperando el centro. Más tarde es Luis Alberto que, tras jugada personal, decide jugarse una vaselina lejana en vez de pasársela al palaciego que entraba solo. En la última jugada Manu remata al lateral una falta de Campaña.
Partido para olvidar de los nuestros, por momentos mal y muy mal. Mucha precipitación arriba, muchos nervios y jugadores tratando de ganar por su cuenta el partido. Cambios previsibles, sin tratar de cambiar nada y sin rematar a portería en 90 minutos. Dejando claro que tenemos muchos problemas para hacer gol y si encima no tenemos delanteros, todo se complica. Por contra quinto empate fuera de casa, cuarto con empate a 0. Seguimos sin perder fuera de casa y sin ganar. Cosas.
Como un día dijo alguien, “quién no arriesga no gana”. Y tu/mi/nuestro Sevilla, fuera de casa no arriesga nada de nada, somos muy previsibles y conformistas al final, y por eso no gana. Quizás por eso tampoco se pierda. Cosas
Menos mal que hoy tuve compañía y tertulia durante el partido…
ÁS_FdN
Muy bien definido el penoso partido que vimos, tan solo se vieron a navas y a caceres, pero los demas no sabian ni donde estaban ni dondo ponerse. Lamentable el ritmo y desconcierto del juego de nuestro equipo. Esperemos que los responsables de una vez, piensen que las semanas pasan y nosotros sin sumar, restando o sumando una minudencia. Un Abrazo