Un día vas y empiezas a analizar cosas que nunca te habías parado a pensar, pero que sé que sabes.
Nos movemos por una inercia prácticamente “zombi”, sin dedicarle demasiado tiempo a pensar que en el momento que se cae una pieza del entramado diario, todo se tambalea cual estructura colapsada. No nos paramos a planificar que el día-vida, tiene más argumentos que los propios de conseguir llevar o mejor dicho, llenar el plato de comida, necesario por otra parte, aunque no suficiente, -imagino que tendré detractores con este discurso, y expreso todo mis respetos- pero, ¿donde se quedan los sentimientos y las vivencias de las personas que nos rodean?. ¿Es que este alimento no termina de satisfacernos y por eso buscamos otros más flatulentos?
Con el paso de los años y las vivencias personales, vamos aprendiendo que en cualquier instante de un individuo como tú y yo, todo se parará en seco debido a que una pieza de nuestro entramado se desajusta, y digo bien, solo se desajusta, no es necesario que se caiga o rompa, y sabemos que cuando esto ocurre, nos tenemos que parar en seco para poder atender otros menesteres de los que no nos preocupamos en el día-vida.
Quizás lo peor de todo esto es que ya arrancamos de la premisa de que haremos un trabajo personal para humanizarnos con nuestro entorno, pero que sobre la marcha sabemos que volveremos a caer en la inercia de vida.
Pasa…, y siendo todo importante, ¿seremos capaces de tener nuestro libro de ruta actualizado también con el corazón?
Quiero trasladaros que a mí me pasa y me cuesta no entrar en ese bucle… ¿Lo conseguiré?…la experiencia de mi día-vida me dice que seguiré cayendo hasta que sea yo la pieza que se desajuste…
Es complicado no caer en ese bucle al que haces referencia ya que el día a día nos lleva a casi ni pensar. Somos robots en busca del «3en1» perdido y solo nos detenemos cuando alguna tuerca de nuestro mecanismo chirría.
Solo espero que dicha tuerca deje de chirriar, consigas volver al día-vida que al menos implica que todo está funcionando.
Pararnos a pensar lo que tenemos, desde el perfil sentimental, sería ideal…
Un abrazo y no dejes de moradear.
Entiendo perfectaamente el dilema, nuestro dia-vida esta formado por un monton de piezas que inesplicablemente se ajustan a la perfeccion cuando por si solas nunca encajarian, he ahi el equilibrio tan fragil, que mueves una, o por circustancias del dia-vida una se cae, y parte cae, aunque para nuestros ojos cae todo, recientemente he tenido ese debate en una parte de mi puzzle particular, por suerte en cosas que no son de primera indole, pero que me desastabilizaron, por mucho que intente buscar la pieza perdida, no la encontre en mi caso rescate una pieza del pasado que en otro debatir se quedo en la caja de las fichas, aunque tambien pudo ser una pieza nueva,
Solo decirte que espero que encuentres la pieza que buscas para reencontrar tu dia-vida, que puede ser una pieza del pasado, una del futuro o una del presente, una de esas caidas con un pequeño lavado de cara, todo se acaba resolviendo, Dios nunca permite que algo se quede por resolver,, ningun proyecto queda inacabado, aunque a veces el camino no sea el que al principio habiamos pensado, pero todo se acaba resolviendo.
un saludo y animo.
Desde mi punto de vista no existe libro de ruta sin el corazón, el cual debe ser el faro que nos guíe por los mares de la vida. Quizás así nuestro día-vida nos depare jornadas soleadas y con el viento exacto para navegar…
Y si no pues a luchar contra las tormentas…pero siempre con el corazón, que es lo que da humanidad a nuestro ser.
saludos y besos…alegría grande al leerte de nuevo!