Tras la victoria en Copa el pasado jueves frente al Espanyol, volvía tu/mi/nuestro Sevilla al Ramón Sánchez-Pizjuán para intentar olvidar la derrota en Zaragoza y seguir mirando a los puestos europeos.
Salía Míchel con el equipo esperado, dada las lesiones, con Luna ocupando la banda izquierda. Saltaban los jugadores en un estadio casi vacío, sin ambiente. Ya sea por la lluvia, por la hora o porque sin el Corazón de Nervión latiendo ya se sabe.
Lo primero que se oyó fue a la Grada Norte pidiendo “solución para el Gol Norte” y hasta eso los pitadores censuran. Ya ni solución quieren, que cosas.
Con un equipo demasiado defensivo para el estilo de juego rival, hoy quizás no era necesario el pivote defensivo y hubiera sido mucho mejor jugar con un enganche o con otro delantero. Como el partido demostró.
El Sevilla, previsible, atacaba por banda derecha, con Navas y Cicinho. El palaciego centra mucho, muchísimo, pero sus pases no llegan a nadie. Por tanto son inútiles.
En la otra banda Luna se fue sumando poco a poco al ataque, un par de internadas suyas acabaron en remates desviados de Negredo. El vallecano vive en una isla, la soledad es su amiga frente a todos. Y si encima batalla en el centro del campo, ¿quién remata? En fin.
Atrás sin problemas, Maduro haciendo la línea. Spahic y Fazio sin problemas al corte, el serbio regaló algún que otro saque de esquina innecesario, y jugando casi más de centrocampistas. Creando juego, sobre todo Fazio. Gran partido del argentino, siendo el mejor del encuentro.
Ocasiones sin mucho peligro de Negredo, Navas y un remate de Medel. Poco más.
Tras el descanso, los mismos sobre el terreno de juego y el mismo juego. Un equipo, el Levante, encerrado y sin crear peligro, y otro impotente de cara a gol, el Sevilla.
Míchel se da cuenta de su error y mete a Reyes por Maduro, el utrerano lo intentó pero no le salió nada, aportó mucha movilidad. Intentar dar el último pase desde 35 metros es una misión casi imposible, luego cuando cayó a banda desapareció.
Todo cambió con la entrada de Babá por Luna. El senegalés en el primer partido remató seco pegado al palo, balón a córner. Minutos más tarde es Medel el que remata desde fuera del área.
Babá cede a Campaña, que había entrado por Rakitic, y el canterano remataba alto. Todo pudo cambiar en los últimos minutos.
Un remate mordido de Campaña acaba en el larguero, el rechace le cae a Babá que con todo a favor remataba alto, altísimo. El senegalés no puede desperdiciar esas ocasiones y a mí no me vale lo de la ansiedad.
Más clara fue la de Medel tras recoger un rechace a disparo suyo, al borde del área pequeña mandaba la pelota al cielo de Sevilla.
Y ahí se acabó el partido. Aunque quizás si Míchel hubiera sido más valiente hubiéramos tenido muchas más y quién sabe si alguna hubiera entrado. Aunque con la falta de gol de este equipo ya hasta lo llego a dudar.
La pena es que arriba están muy tranquilos porque tenemos gol y muchísimo. La pena es que arriba están muy a gusto viendo el ambiente que hay en Nervión. Y el próximo partido en casa es el derbi, no digo más.
Como dice el proverbio galés, “el que quiera ser líder debe ser puente” y la cabeza visible del Sevilla niega, con su discurso, la mano para alcanzar una solución dentro y fuera del campo. Una pena.
ÁS_FdN
celia says
5 noviembre, 2012 at 10:33Partido que, aunque el sevilla no jugo mal, como siempre que le ocurre a la hora de meter el balon en la porteria? no se pero desesperante cuando una y otra vez, los balones van al cielo. Asi no se llega a ninguna parte y, parece ser que los que tiene que ordenar esto, no estan por ellos.
Desanimacion al completo, pena, pero ………. es lo que hay . Animo y a ver que pasa el proximo partido ( pero claro las semanas van pasando) un abrazo.
el guerrero says
5 noviembre, 2012 at 12:26Los comentarios vertidos por parte de los dirigentes del Club son reales: no necesitamos un delantero, no, necesitamos 2 y además buenos.
¿Seguro que Babá es futbolista?
el filosofo says
5 noviembre, 2012 at 13:49Babá falla una clara, pero en el rato que estuvo remató con peligro, jugó de espaldas… aportó. Si mete esa hubiera sido perfecto. el problema no es ese….una primera mitad tirada por el planteamiento ultradefensivo de Míchel.
Si esto lo hiciera otro… cabezas!!
en fin….