Todo un mundo de sensaciones bonitas es lo que siento cuando entro en una librería. Esa magia, ese olor al pasar las páginas de los libros, ese sonido único de antiguo a la vez que actual… Algo sempiterno…
Con la feria del libro me pasa algo parecido, siempre he pensado que para mí entrar allí es peor que entrar en una tienda de complementos… Y quien me conoce lo sabe. No hay dinero en el mundo, y en mi bolsillo menos, para poder hacerme con todos esos manuscritos que veo y me llaman la atención… Unos por su temáticas, otros por su título, otros por su portada y otros simplemente me llaman para venirse a casa conmigo.
El jueves dio comienzo la FLS (feria del libro Sevilla), y hoy, no podía ser de otra forma, allí estaba yo, a las 18 de la tarde para ir a la firma del libro de mi querido profesor, Tomás del Rey Tirado.
Su libro, su tesoro, su hijo pequeño titulado «Yo, que tantos hombres he sido» es una recopilación de microrrelatos salidos de una locura que solo tienen los grandes de verdad, como él.
Tengo mucho que agradecerle. Me inculcó el amor a los libros, a la lectura, a escribir… Y si hoy soy un pequeño ratón de biblioteca es gracias a él. Me convirtió en amante de las letras y en admiradora de la poesía, donde hice mis pinitos, hasta que me di cuenta que aquello no era lo mío… Pero, gracias a él, no cesé nunca en el intento de continuar escribiendo.
Cuando le pregunto cómo le dio por escribir microrrelatos, su respuesta es la que imaginaba… «Ni siquiera lo sé…» Tiene que dedicarse un tiempo para ellos, donde sólo se dedica a hacer eso, porque no tiene nada que ver un relato con un microrrelato… Desvaríos varios, llegamos a la conclusión.
Ilusión inmensa la que me ha hecho hoy verlo, aunque fuera con una mascarilla de por medio, besos en el aire que cada uno recogemos y que yo guardaré en mis recuerdos bonitos, como la dedicatoria de su libro hacia mi persona… Una alumna que se convierte en algo más que eso… A lo que añadiría, de la mano de un profesor que se convirtió en mi referente.
Siempre le estaré agradecida y jamás olvidaré sus clases, sus enseñanzas y sus divagaciones desmenuzando tesoros de nuestra literatura.
Tomás del Rey says
24 octubre, 2021 at 05:45Gracias, Mayte, por tu generosidad. El encuentro con lectoras como tú justificaría por sí solo la feria. ¡Vivan los libros y los lectores dispuestos a dejarse llevar por las letras!