Uno de los mayores espectáculos del mundo del deporte se celebraba en la tarde de hoy. Millones de espectadores del mundo entero siguiendo el partido en el Santiago Bernabéu entre Real Madrid y Fútbol Club Barcelona.
Ambos, a pesar de llegar al partido igualados a puntos en Liga (22 puntos), partían con una diferencia de ánimos y moral evidente tras el batacazo culé en Champions.
Así, sin prácticamente dudas en los onces iniciales, Ancelotti colocaba a
?Lunin
?Carvajal, Militao, Alaba, Mendy;
?Tchouameni, Kroos, Modric;
?Valverde, Vini Jr y Benzema.
Xavi saltaba con el siguente once:
?Ter Stegen;
?Sergi Roberto, Koundé, Eric García, Balde;
?Busquets, De Jong, Pedri;
?Raphinha, Lewandowski, Dembélé
Tal vez llamaba la atención que Pedri aguardaba en el banco y el Real Madrid con todo, colocando a Fede Valverde, el que después sería el MVP del encuentro, en banda derecha. Rodrigo aguardaría sus minutos que llegaron tarde, para dar descanso al que mañana recibirá el Balón de Oro, Karin Benzema.
Arranca el encuentro y el FC Barcelona luce en su camiseta el búho, tras el acuerdo con Spotify.
Pronto se vería la gran diferencia entre ambos equipos y tras un primer aviso de Vinicius, llegó el primer gol. Tras las dudas por su estado de forma, Benzema anota el primer gol.
El Barça, en su necesidad de ir siempre a por el partido, presionaba en bloque alto y eso ante el Real Madrid se termina pagando.
Minutos de poco fútbol, muchos cortes, muchos cuidados en la posición y en la marca como protagonistas de este partido.
Hasta el descanso, más tensión que fútbol pero aún así, sin balón, el Barça de Xavi Hernández ha tenido dos claras en esta parte aunque se apaciguaría rápido tras el golazo de Fede Valverde desde fuera del área, pegado al palo derecho de Ter Stegen que nada puede hacer por detenerlo. Minuto 36 y el Clásico se comenzaba a vestir claramente de blanco.
Con los mismos protagonistas que se marchan a vestuario arranca la segunda parte hasta que en el minuto 60, triple cambio de Xavi:
➡️Ferrán Torres, Gavi y Jordi Alba
⬅️Raphinha, Busquets y Balde.
Con esto, Raphinha vuelve a ser el sacrificado de Xavi cuando, sin llegar a ser protagonista porque ninguno estaba destacando, quita a uno de los más insistentes. Ante el Inter también fue sustituido cuando estaba siendo el mejor del equipo. Cosas y caprichos de entrenadores que prefiere a Dembele por derecha.
Al poco, nuevo cambio de cromos y ahora es Ansu Fati el que salta al terreno de juego quitando al citado anteriormente Dembele que ha hecho un pésimo encuentro.
La defensa Del Real Madrid ha sido superior al ataque culé y sin duda, la triplete Tchouameni-Kroos-Modric, con la ayuda del incombustible Fede Valverde han dominado a otro centro del campo donde Busquets demuestra que se apaga poco a poco, donde el holandés De Jong no parece ser el del Ajax y ni Pedri, ni después un desconcertado Gavi han aportado fútbol, control y orden.
Ya en el 83, gran jugada de Ansu Fati que se va por velocidad de su marca, entra en el área, Lewandowski la deja pasar tocándola ligeramente con el tacón y Ferrábamos libre de marca anota con la zurda el 2-1 que a falta de 7 minutos más el descuento le daba algo de emoción al final del partido.
Poco dura la felicidad en la casa del “pobre”…
Cambios sucesivos en el Real Madrid que despide de pie a Benzema al grito de ¡Balón de Oro! ¡Balón de Oro! Y salta Rodrigo que en el 90, con 6 minutos de descuento provoca un penalti con un regate que se come Eric García que llega tardísimo, pisa al brasileño y tras ser avisado por el VAR, Sánchez Martínez, colegiado del encuentro, va a la pantalla y pita un claro penalti que lograría materializar el propio Rodrigo, especialista en goles en los últimos minutos saliendo desde el banquillo.
Se acaba un choque descafeinado por momentos, donde se evidencian lagunas tácticas clarísimas en el FC Barcelona, incapaz de jugar a “otra cosa” cuando los partidos lo requieren.
El Real Madrid se coloca líder en solitario tras este 3-1 y genera muchas más dudas en Camp Barça después de la debacle europea y la derrota ante su máximo rival liguero.
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