
En una audiencia celebrada esta semana en el Vaticano, el Papa Francisco recibió al alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, quien le trasladó una invitación formal para visitar la capital andaluza, ciudad reconocida por su profundo legado religioso y cultural.
Durante el encuentro, el edil sevillano destacó el papel de Sevilla como un referente internacional de fe y tradición, con especial mención a su Catedral, una de las mayores joyas arquitectónicas del mundo cristiano, y a la Virgen de los Reyes, patrona de la ciudad. Como símbolo de este vínculo espiritual, el alcalde entregó al Pontífice una representación artística de la Virgen, realizada por Ricardo Suárez.
El objetivo de la visita, según expresó Sanz, sería estrechar los lazos entre Sevilla y la Santa Sede, al mismo tiempo que se resaltaría el papel de la ciudad como epicentro de la devoción católica, particularmente visible durante su famosa Semana Santa. “Sevilla es una ciudad que vive su fe con intensidad y que recibiría al Santo Padre con los brazos abiertos”, afirmó el alcalde.
El Papa Francisco, conocido por su cercanía con las comunidades locales, escuchó con interés la propuesta y valoró el compromiso de Sevilla con la fe y la tradición cristiana. Aunque no se confirmó la fecha de una posible visita, la invitación simboliza un puente de diálogo entre el Vaticano y una de las ciudades más representativas de la espiritualidad en España.
De llevarse a cabo, la visita del Papa a Sevilla marcaría un hito histórico, bajo el marco único que ofrece la majestuosa Catedral de Santa María de la Sede.
