No llevo mapas, porque no tengo un destino. Primero avanzo el pie derecho luego el izquierdo, o a la inversa. Soy, simplemente, un caminante expulsado de una sociedad con mucho ruido. Me muevo por el mundo portando una libreta con la que converso. El universo está en mi interior.
Calila
I
Partiendo desde un árido desierto de cine,
Caminando por los dorados campos entre olivas y azahares,
Llegando a litorales de luz salada y plata,
El caminante partió su alma en mil fragmentos, dejando que el viento del sur los dispersara. Al final, en la orilla, se halló a sí mismo, perdido pero encontrado.
II
Donde el sol besa el mar, al desierto y a las montañas,
Donde el viento canta coplas y la lluvia tararea nanas.
Sonrió al regresar, sabiendo que siempre sería del sur, sin importar dónde caminara.
III
Nervioso en el estimulante asfalto, remansa la paz interior en la calma del monte.
Desgaste acumulado en el calzado, desahogo en mente.
Tus pies hablan de tu camino, caminante, mientras que tu cabeza planea su próximo destino.
Rocío C Gómez
Con paso firme y mirada al frente, va el caminante, hay quienes dicen que es errante, más sabe bien hacia donde se dirige. Nada hasta ahora lo ha frenado, ni las arenas que queman sus pies, ni el viento que le hace temblar, ni la niebla que acorta su vista, ni el sol que quema su piel.
Firme en su destino, camina.
Manuela Sánchez
I
Haces camino al andar,
camino que otros disfrutarán
sin desandar,
siguiendo tus pasos.
Pisa firme, sin titubeos,
con seguridad y sin desvelos.
Sin mirar atrás, sin freno,
Dejando huella en el tiempo.
II
Qué me gusta una huella en la arena húmeda…
III
Tratando de dejar huella solo por y para ellas.
Juanma García
En la vorágine de lo inmediato, los ejemplos que deberían perdurar se disuelven como humo en una tempestad. Quienes ostentan el deber de marcar senderos optan por la banalidad, dejando tras de sí un vacío desolador, donde la excelencia es un eco ahogado.
Nemesio Laverde
La libertad en sus pasos,
los pies caminando por la arena, descalzos.
Ángel Salgado I
Mejor mirar hacia delante, para poder avanzar. Por si mirar al pasado, no te deja caminar.
Ángel Salgado II
De vuelta a casa, pensó
en cómo se sentiría mañana.
De repente, sonrió
por el recuerdo de su mirada.
Ángel Salgado III
I
Hoy me acuerdo de ti, gran olvidada y no del caminante protagonista de cada viaje.
Tú, que siempre quedas atrás.
Tú que eres siempre señal.
Tú que marcas el camino de verdad.
Tú, preciosa y olvidada huella.
II
Las huellas en la arena no eran solo suyas; eran de todas las que antes caminaron, resistiendo tormentas. Cada paso, una rebelión. Cada huella, un legado.
III
Al mirar atrás, lo entendió: no estaba sola, avanzaba con la fuerza de quienes nunca dejaron de andar.
IV
Confianza en el
Andar,
Mirada fija en el horizonte,
Inquebrantable en su propósito,
Navegando adversidades,
Afrontando retos con valentía,
Nutriendo sueños y esperanzas,
Trazando nuevos caminos,
Encarnando libertad y fortaleza.
Anita
De playas desiertas fui caminante. De una concurrida urbe, de un salpicado bosque de árboles majestuosos, de un viejo arrabal que no volverá, de recuerdos que salen a flote. Y es entonces cuando navegas en esta inmensidad…
Patricia Delgado