Nos la prometíamos muy felices, mucho. Parecía que Manzano había acertado con el tándem de medios. Medel y Fazio daban seriedad a un equipo de adolece de galones en todas sus líneas… todo fue un espejismo.
Partido en el Reyno de Navarra, campo de batallas de muchos de los nuestros. Todos recordaremos esos enfrentamientos entre Webó y el Chengue Morales y nuestro Muro Navarro y Alfaro, Javi y Pablo… cuánto os echamos de menos…
Como os iba diciendo, nuestro Sevilla FC saltó al campo con las curiosidades del míster; debut de Bernardo en un campo muy complicado, Fazio y Medel juntos en el centro del campo, y el Laucha haciendo las veces de Jesús Navas….que gran fichaje de Víctor Orta!!! Bueno al menos arriba teníamos al gigante y al tanque.
Pues este último es el único que se salva de toda la quema, un tío, de Vallecas, que lo da todo y algo más en cada partido y que a muchos no les parezca un buen delantero, este que escribe piensa que es un excelente delantero para el Sevilla FC. Estéticamente no es Luisfa, ni tiene la zurda de Suker, ni el poder de Poulsen, ni el salto de Bam Bam Zamorano, ni es canterano, pero el tío curra como el que más y fijaos en sus números, ellos hablan por sí solos.
La primera parte, palmera en el Oasis más idílico, fue justo eso, un espejismo. Según Wikipedia, un espejismo, y copio, es una ilusión óptica en la que los objetos lejanos aparecen reflejados en una superficie lisa como si se estuviera contemplando una superficie líquida que, en realidad, no existe. Si sustituimos objetos lejanos por equipo bueno de fútbol, superficie lisa por terreno de juego o campo de fútbol, y superficie líquida por EQUIPO, tenemos el resumen de lo que ocurrió en Pamplona.
Dos jugadas, una falta lejana que remacha Álvaro de forma salvaje y una jugada de Perotti que va al palo y empuja de forma magistral el vallecano y se acabó todo. El control que parecía se esfumó con el inicio de la segunda parte.
Y de la segunda parte qué decir; un desastre tras otro, una cagada tras otra, una lesión tras otra. Sergio, Fazio…y el resto del equipo con los brazos abajo, la cara desfigurada y aguantando el chaparrón. Manzano nada podía hacer ya que los cambios fueron obligados…y Negredo casi roto y seguía corriendo. A Kanouté casi ni se le espera ya…una pena, la mayor de todas, posiblemente. Un gol tras otro, un arreón tras otro y nuestras vergüenzas al aire. En la típica conversación por chat filósofo-guerrero, hasta al filósofo le sobraban jugadores -¿he dicho jugadores?, perdón, quise decir payasos disfrazados del Sevilla…- Quedaba muy patente que Fazio no es jugador para el Sevilla que todos queremos, que Dabo no vale ni para segunda parece claro, Acosta es un manta de mucho cuidado, a Bernardo hay que darle partidos y confianza y no tirarle al Circo a las primeras de cambio y a pechodescubierto. Kanoute está listo de papeles, y Capel…angelito!!! El de Albox es como dicen en mi pueblo: “la muerte pelá”
Siento que esto no parezca una crónica, con la salvedad de la de una muerte anunciada, y que no hable de fútbol, pero es que no me sale y como diría Tino Tovar: “no me sale, no me sale…”
Esperemos que acabe pronto la temporada, que Manzano se vaya por dónde vino, que echen a toda la banda ésta que nos engaña partido sí, partido también, que lleguen jugadores nuevos tipo Trochowski, Manu del Moral… y que nos den las alegrías que les pedimos.
Yo sólo pido sentirme orgulloso de mi equipo y mis jugadores. Sólo eso…
el filosofo says
12 mayo, 2011 at 15:20Muy duro lo de ayer…mucho más que lo del sábado de Feria. Tan duro que me quedé sin ganas y sin palabras para escribir esta crónica. Una pena la falta de orgullo, de ganas y de amor…ya no por unos colores sino de amor propio…una pena.
Que se acabe esta temporada, esperemos que con Uefa aunque sea con previa, y empecemos a soñar de nuevo.
Como dijo Duque de Levis, «Estableced el orden, el hábito se encargará de mantenerlo»