Madre estas letras van a ti, a tu figura, a tu espíritu, a tu persona como hermana, amiga, madre y protectora.
Creo que sabrás de sobra que Madre solo hay una. A mi, sinceramente, me gusta decir que hay dos: “A una la conozco y a otra no” dicen algunos, yo puedo decir con orgullo que os conozco a las dos, a la perfección.
Para mí, mi madre es la persona que me quiere, aunque tenga que perdonarme más de una vez mis travesuras y mi poca cabeza; es aquella que me cuida, esté o no enferma, que me cuide sin obligación, que lo que haga le salga de lo más profundo de su alma; es la persona que me da consejos, los mejores que puede darte con diferencia, los consejos de tu madre te aseguro que te llevarán por el mejor camino; y, por supuesto, es aquella que me observa con lupa, gracias a dios. Siempre pendiente de su niña, de su pequeña, de aquella que ha visto crecer y ha llevado en su vientre con orgullo.
Me encanta presumir de madre. Pero si puedo presumir que tengo otra madre, a la que pocas personas la consideran como yo, me gusta aún más. Hay una cosa que no acabo de entender sobre las personas que dicen que te aman, las personas que dicen que te adoran y te siguen. Sé que cada uno te mira con sus propios ojos, que para cada uno tienes un nombre y una forma, pero a mi me gusta pensarte diferente.
Es cierto, no voy a negarlo, que hay nombres y formas que tengo como favoritas, pero no descarto ni aborrezco las demás. Mi madre es mi madre, ya sea negra, blanca o amarilla; ya tenga una flor, un velo, o un sombrero; un vestido negro, verde o amarillo…no me importa. Estás guapa como te pongan y con lo que te pongan, y estoy segura que muchas de aquellas personas que presumen de ti, madre, no te quieren tal y como eres, no están de acuerdo con tu cara, tu atuendo o tus actos. Pocas personas te quieren tal y como eres, y yo puedo decir con orgullo que estás perfecta como estás. Siempre has sido perfecta y lo sigues siendo. No te preocupes por algunos, en el fondo creo que todos te tienen aprecio. O lo espero.
Leo segundas intenciones en un escrito dedicado a la MADRE.
Qué más dará el atuendo ¿verdad? Lo importante en la figura insustituible…
Brillante!!!