Hasta sin voz, o eso alega Lopetegui en una de sus múltiples e injustificadas excusas para cumplimentar con la prensa su Presentación en público tras un nuevo ridículo a todos los niveles de un equipo que lleva a la deriva demasiados meses.
Sin ideas, con los jugadores alocados y descolocadnos, hastiados, fundidos, sin plan a, ni b, y mucho menos c.
Sin ilusión y con los brazos caídos, con una grada que empieza a oler mal y con un banquillo inoperante que se limita a cambiar mire por hombre en un esquema que NO funciona hace casi un año.
Sin fútbol, sin sistema defensivo real y mucho menos ofensivo. Sin velocidad, sin desborde, sin regate, sin ganas, sin gol, sin centros, sin tácticas, sin cambio de estilo, sin prisas hasta el descuento. Sin ocasiones de gol…
Sin entrenador, sin papeles, sin pizarra, sin cerebro, sin voz pero con múltiples excusas y un único y demasiado visto discurso conformista rozando la mofa hacia una prensa que pregunta y una afición que sufre como un perro.
Nuevo desastre en todos los sentidos, en todos. Un punto que sabe a derrota ante un equipo prácticamente de segunda división que vino tras recibir seis goles en su casa y que con casi nada, ha sido capaz de un empate y casi se lleva la victoria.
Falta un punto, ¡un punto! y éste que escribe es muy negativo ante tal reto.
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