Desgarrador sonido que sobresale en la noche. Imparable surca las ondas cerebrales del receptor. Se cierra la noche, continúa la tormenta.
Luces de colores rebotan sobre el asfalto mojado, la lluvia magnifica su intensidad haciéndola visible en toda la ciudad. Sigue lloviendo, la tragedia ya se ha mascado.
Vecinos acuden en masa a la llamada de la tierra, se agolpan desconcertados alrededor de los focos. Bajo la lluvia y alarmados por el bullicio. Aprieta la tormenta, no para de llover.
Un grito que confirma lo inevitable, un grito que será eterno en sus corazones. La tierra como paso inevitable para la eternidad.
Buen viaje.
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