Dormir en el 12º puesto de la clasificación después de la temporada que llevamos es cuanto menos para irse feliz a la cama, después de ganar y de ver que los últimos en llegar funcionan y le dan esa “cosita” que el equipo necesitaba.
Nos visitaba el Mallorca del mexicano Aguirre, del pirata Muriqi y los atacados por la prensa capitalina Maffeo y Raillo entre otros…
Sampaoli sigue consolidando un esquema de tres centrales donde hoy tiró a la izquierda a Gudelj, acompañado de Badé y Nianzou.
En las bandas, Jesús Navas “recuperado” y Bryan Gil que saltaba al Sánchez Pizjuan en el día de hoy ocupando plaza de carrilero zurdo, recordando el invento de la etapa pasada de Sampaoli cuando colocaba ahí a Sarabia con la clara intención de atacar.
Por delante Fernando, que no está bien, Pape Gueye, Oliver, Suso y arriba En Nesiry.
La primera parte ha sido bastante buena tanto a nivel de fútbol como de puntería.
El equipo mandaba, creaba lo justo pero sobre todo se le ven maneras. Ya no hay tanto despiste; ya no hay tantísimo pase absurdo atrás; ya no hay tantas señales del Atila vasco que se marcho del banquillo hace unos meses y comienza a brotar la hierba de nuevo.
Los goles han sido obra del internacional marroquí En Nesiry a pase a Pape Gueye y de Bryan que ha empujado en línea de gol un centro raso de Navas que se ha paseado por el área chica hasta que el de Barbate, junto al Segundo palo, la toca para asentar la tácalas en la grada.
El Mallorca no ha creado prácticamente ocasión alguna pero aún así, destacar la actuación serena de Loïc Badé que no entendemos cómo sin ser una estrella mundial, no ha tenido minutos en la Premier en un equipo sin aspiraciones.
Destacamos a dos de los nuevos, Pape Gueye en el control del juego y una gran presencia en todo el centro del campo y al incansable Bryan Gil que ha tratado de encarar una y otra vez desde su perfil zurdo durante todo el partido.
Luego llegaron los cambios del técnico de Casilda y volvimos a ver a Rakitic y Ocampos intercambiándose el falso nueve. Parece evidente que en estos momentos Rafa Mir no cuenta para el técnico.
Grada eufórica y es que con muy muy poquito somos felices… ayyyyy si Sampaoli, o el que fuera, hubiera jugado en junio y no tan tarde… cosas de ese negocio llamado fútbol.
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