
¡Cafinitrina para todos!
Así podríamos definir la primera parte vivida en Nervión donde lo único bueno ha sido el empate de penalti de Ocampos.
Nos visitaba el Almería, ambos en puestos de descenso, ambos siendo de lo peor de La Liga, ambos de blanco y rojo -o rojo y blanco-, ambos andaluces, ambos… en fin. Esperemos que en ambos no nos lleve a Segunda a ambos.
En la previa, lluvia de billetes con las caras de Laporta, Rubiales y Enríquez Negreira…

Aun recolocándose el equipo y en el primer minuto, gol de Akieme. Así, en frío, sin colocarse aún el equipo porque los despistes se pagan y vaya si se ha pagado.
Saque de centro, un par de toques y una jugada por banda derecha termina en las espaldas de Navas y la llegada del lateral zurdo almeriense que anota el 0-1. ¿Sabéis aquello de que a perro flaco todo se le vuelven pulgas? Pues eso mismo…
Lo que Pozo nos quita, Pozo nos lo da… luego lo entenderán.
Llegan minutos de caos total: lesión de Akieme, lesión de Toure el Bilal. El delantero se sale y entra para tirarse dentro del campo para parar el partido y Akieme se marcha también no sin antes, entrar, salir, volver a entrar y dejarse caer hasta ver la quinta amarilla. Total, se va a perder el próximo partido por lesión, pues fuerza la amarilla y cumple ciclo. Nada es casualidad en esto del fútbol, aunque muchos quieran ver lo contrario.
Y desde aquí, asedio de un pésimo equipo sin ideas, sin precisión en el pase, sin esquema de juego, sin claridad,… sí, ese es nuestro Sevilla FC en la primera parte. Gudelj loco por huir del trío de centrales, Jordan en algún sitio, Navas abriendo el campo y destrozando todos los ataques con su manido recorte para dentro y su pésimo centro “al área”. Qué mérito tenían Kanoute y Luis Fabiano, qué mérito… bueno, y Suso… da igual donde se encuentre; se gira, se recoloca la pelota a la izquierda, se intenta meter por dentro andando y la suelta sin peligro.
Por suerte, Telles y Ocampos y sus alocados cerebros nos aportan algo fuera de la planicie en la que nos encontramos…
En una jugada a balón parado, para seguir con el crecimiento de los enanos, el circo abre sus puertas y Bono sale de puños a despejar un balón, lo despeja, despeja a Babic del Almería, a Telles y de camino se lesiona. Collarín, camilla, Cruz Roja y salida del estadio,… Dmitrovic al campo. Tercer cambio del partido por lesión.

Y sigue el asedio ante el frontón franjjirrojo y claro, el equipo demuestra que no hay más y que no da para más y más aún, en este estado de ansiedad en el que cada segundo es el último y así es complicado, muy complicado.
Seis minutos de descuento en la primera parte y en el primero de ellos, penalti de Pozo a Telles tras balón en profundidad de Ocampos. De ahí lo de Pozo del inicio.
El penalti lo lanza el argentino Ocampos y gol. Empate a uno, la grada respira y las pulsaciones comienzan a bajar de 200…
Se acaba la primera parte…
Arranca la segunda parte, ¿o es la primera otra vez?
Se repite la historia del inicio del partido con la diferencia de que ahora el Almería no ha anotado pero el desconcierto, la falta de confianza y de concentración nos hace ver cómo en los 4 primeros minutos, el Almería ha podido anotar dos goles donde Dmitrovic le salva la vida a Jordan que nuevamente la lía con uno de sus pases y… ¡lesión de Nianzou!
Dieciséis millones de euros en un niño del que un día le dijeron que iba a ser bueno y Monchi se lo creyó y ahí está Nianzou, un chiquillo inexperto no cualificado, actualmente, para el fútbol de élite. Sí, dieciséis millones de euros, 16,…
En su locura, Sampaoli pone un nuevo granito de arena para la pérdida de papeles total del equipo sacando a Bryan Gil de carrilero y Telles de central zurdo. Luego nos quejaremos pero esto es insostenible.
En el 62, Ocampos. Suso y Telles salen del terreno de juego y Lamela, Oliver y Acuña entran para refrescar al equipo adelantando a Bryan Gil, ocupando Acuña el carril zurdo.
En el 65, En Nesiry la tuvo de cabeza a pase de Oliver que sale lejos.
En el 73, tras minutos vergonzosos nuevamente, gran jugada de Bryan Gil que la pone y el Coco Lamela entra de cabeza y gol. 2-1 y por fin las pulsaciones regresan a 100…
Que no se nos olvide que es el Almería el rival, que llegaba a Nervión con los mismos puntos que nosotros ahí abajo en el pozo. Vaya, otra vez surge Pozo justo cuando respiramos y parece que salimos tímidamente de él.
Un minuto después, Suárez ha estado a punto de anotar el empate pero Dmitrovic está en modo estelar y salva con la manopla el gol.
En el 85, En Nesiry se marcha en profundidad y solo delante de Fernando, lo dribla y casi sin oxígeno ni piernas echa la pelota fuera…
Siguen cayendo los minutos…
En el 90 y con otros 6 minutos de descuento, contra fantástica que lleva Oliver y Rakitic y que Lamela no acierta a anotar delante de Fernando, incluso acompañado de 3 compañeros, principalmente En Nesiry que se lamentaba de no recibir un último pase.
De Burgos Bengoechea anuncia que a los 6, le añade uno más…
Y se acaba el suplicio de hoy, escalamos varias posiciones y la soga aprieta una vuelta de tuerca menos…
A pesar de la intranquilidad y el sufrimiento, gran encuentro de Loïc Badé, Gudelj y Bryan Gil que cuando se recolocó de extremo consiguió desestabilizar la defensa almeriense y por supuesto, Marko Dmitrovic. Partidazo el del serbio.

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