Primer once de la era Mendilibar con algunas novedades y con jugadores que conoce bien de otras etapas. Dmitrovic se hacía con la titularidad, defensa de cuatro, medio del campo reforzado, bandas naturales y jugadores en sus sitios. Básico.
Dmitrovic – Navas, Gudelj, Badé, Acuña – Gueye, Jordán, Rakitic – Ocampos, Bryan Gil, En-Nesyri.
Con el equipo algo encerrado y despejando balones sin complicación iban pasando los primeros minutos de partido. Una mano involuntaria de Pape Gueye (mano sí, penalti nunca) y un cruce providencial de Gudelj marcaron los momentos de tensión inicial.
Respondía el Sevilla con dos remates, casi consecutivos, de cabeza de En-Nesiry que salían desviados.
Una nueva jugada dudosa, en la que se dejan caer antes del contacto de Jordán dentro del área, acaba sin tarjeta para el jugador del Cádiz por fingir.
Seguía atacando el Sevilla por bandas, tanto Bryan como Navas y Ocampos suministraban balones a En-Nesiry que se precipitaba desde fuera del área. En una presión alta del marroquí, Ocampos tuvo su ocasión para inaugurar el marcador.
Badé veía la tarjeta amarilla a la media hora tras un balón a las espaldas del central, que llegaba tarde y golpeaba al delantero cadista.
Por su parte el Cádiz repartía dos patadas sin balón seguidas a Rakitic y Pape, sin pitar y sin amonestación.
Tras una recuperación de Ocampos, se botaba un córner que acababa en remate alto de Gudelj, agarrado por su defensor. Pocos minutos después, un nuevo «abrazo» a En-Nesiry… ¡jueguen jueguen!
Con Mendilibar se veía un fútbol más directo de tu/mi/nuestro Sevilla, con transiciones rápidas, buscando el área y la portería rival.
Sin más se llegaba al descanso del partido con empate a cero. En la reanudación, los mismos protagonistas sobre el Nuevo Mirandilla.
Tras dos saques de esquina consecutivos, y un nuevo agarrón a Gudelj dentro del area, Jordán sacaba fuerte al primer palo, el portero despejaba de puños y el rechace acababa en los pies de Ocampos, que remataba a la red haciendo el 0-1.
Especial dedicatoria de Lucas.
Después del gol sevillista, se calentaba un poco el ambiente, tanto en la grada como en el terreno de juego. Con el paso de los minutos se atemperaba y recalentada de nuevo. Cosas.
Bryan, que lo intentaba sin acierto, recibía la tarjeta amarilla por dejarse caer en el área cadista.
El Cádiz apretaba y el Sevilla sufría. Dmitrovic fallaba en la salida y el remate cadista se estrellaba en el poste izquierdo del serbio.
Seguía subiendo la temperatura en Cádiz, la grada, entre insultos, clamaba contra los malos arbitrajes recibidos en jornadas anteriores. Mientras los jugadores soltaban brazos y patadas por detrás, sancionadas esta vez con tarjetas amarillas.
En el minuto 70 llegaba el primer cambio de Mendilibar, Lamela entraba en sustitución de Rakitic.
Providencial Jesús Navas al borde del área pequeña, tras un mal despeje de Badé en plancha a ras de suelo, evitando el empate.
Y en la siguiente jugada, balón largo de Badé, Bryan duerme la pelota para En-Nesiry que remata con la derecha haciendo el 0-2. Maravillosa la asistencia del canterano sevillista, que sería sustituido minutos después por Suso. En-Nesiry se lo dedicaba a su compatriota Bono.
Con el segundo gol sevillista, el partido se acabó. Con un Cádiz a la desesperada y un Sevilla haciendo daño a la contra fueron pasando los minutos.
Entraban al terreno de juego Telles y Oliver por Acuña y el goleador Ocampos.
Con cinco minutos de prolongación y el partido abierto, pudo sentenciar Oliver, que debió buscar el pase atrás pero decidió rematar.
Victoria fundamental de tu/mi/nuestro Sevilla en un campo complicado, no ganaba nadie desde septiembre, que nos permite tomar algo de aire en La Liga.
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