Hoy, en el gran derbi, se ha evidenciado la verdadera diferencia futbolística entre el Sevilla Fútbol Club y el Real Betis Balompié, dos equipos en situaciones completamente opuestas.
En todos los aspectos, el Real Betis Balompié de Manuel Pellegrini ha mostrado la suficiente solidez para llevarse el partido, pero la falta de acierto de cara al arco rival evitó una goleada vergonzosa que hubiera generado caos en el equipo de Nervión. Desde el inicio del encuentro, un desajuste defensivo del Sevilla permitió un centro de William Jose que llegó a Isco, quien remató solo de cabeza, pero inexplicablemente no consiguió anotar. A pesar de ello, el equipo del Real Betis mantuvo su dominio, el cual fue predominante durante todo el encuentro. En otra jugada de Isco, se habría originado un tanto anotado por Bellerín; sin embargo, tras revisión del VAR, el marcador se mantuvo en empate. Posteriormente, una gran oportunidad generada por Isco dejó a Miranda en un mano a mano con Dmitrović, quien evitó el gol, manteniendo al Real Betis en su búsqueda por el primer tanto.
En la segunda mitad, el equipo rojiblanco parecía tomar cierto control del partido, pero las ocasiones más claras seguían siendo del Real Betis Balompié. Una brillante combinación entre Isco y Ayoze envió la pelota al palo, inquietando a la afición local.
Finalmente, el gol del Real Betis Balompié llegó tras numerosos intentos. En una jugada de balón parado y una mala salida del portero serbio, el delantero canario anotó el 1-0, justicia reflejada en el marcador respecto a lo visto en el terreno de juego.
Los cambios se sucedieron, y en ese momento, un balón suelto llegó a Rakitić a unos 40 metros, y este lo envió a las redes sin que el portero Fran Vieittes pudiera hacer algo al respecto. El gol levantó el ánimo del equipo sevillista, aunque el Real Betis Balompié se mantuvo firme en su actuación defensiva, manteniendo un partido serio.
El partido concluyó con un empate a uno y una sonora pitada al final por parte de la afición sevillista, dejando en claro que el Real Betis Balompié permitió al equipo de Nervión mantenerse vivo, algo que no se veía desde hace muchos años, mostrando una superioridad inusual.
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