No pretende este post ser el introductorio de una nueva sección , ni mucho menos. El tema de los parecidos razonables está un poco visto, la verdad, pero este escrito viene a plasmar que siempre hay uno de esos parecidos y cuando te lo encuentras…
La historia es que esta mañana @joagarcía y yo estábamos tomando café, cuando él se percata de la presencia, varias mesas más para atrás, de Rubén Castro. Tras las risas típicas y los comentarios jocosos por lo extraño de encontrárnoslo tomando un café y leyendo un periódico, tras la fama que rodea al futbolista, hablamos de hacernos un selfie con el cuando nos marcháramos.
Acabamos nuestro café comentando la jugada, pagamos, fui al servicio y cuando regreso, nos acercamos a la mesa del otrora futbolista en nuestras retinas, y ¡¡¡zas!!! De frente era la misma estampa del futbolista y al acercarnos, vimos que ni Rubén, ni Castro, ni futbolista ni selfie…
Podéis imaginar nuestras risas al pensar que nos íbamos a hacer un selfie con un cualquiera que posiblemente nos podía haber mandado un poco lejos.
Moraleja: mucho ojo con los personajes y las falsas apariencias. No siempre detrás de alguien que parece bueno, hay una buena persona…
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