
El Real Betis inauguró su nueva etapa como local en La Cartuja con una victoria por la mínima ante el Deportivo Alavés. El conjunto de Manuel Pellegrini se impuso 1-0 gracias a un gol de Giovani Lo Celso en la primera parte, en un encuentro que reunió a casi 55.000 aficionados verdiblancos y que supuso el estreno oficial del estadio como nueva casa bética.
El choque comenzó con un Betis enchufado, decidido a dominar desde el inicio. La presión alta dio frutos en el minuto 16, cuando un robo en campo rival derivó en una jugada aérea que terminó con el balón a los pies de Lo Celso. El argentino, con mucha calma, definió con precisión para batir a Sivera y poner el 1-0 en el marcador. El tanto reforzó la confianza verdiblanca, que dispuso de ocasiones para ampliar la ventaja, aunque le faltó acierto en los últimos metros.
En la segunda mitad, el Betis buscó administrar su renta y se mostró sólido en defensa. Ahí emergió la figura de Pau López, que intervino con acierto en un par de acciones clave para mantener la portería a cero. Su actuación dio tranquilidad al equipo e hizo olvidar, por momentos, los problemas bajo palos que habían marcado la pasada temporada. El Alavés trató de reaccionar con más balón y empuje en campo rival, pero se topó con un Betis ordenado y con un portero seguro.
El estreno en La Cartuja estuvo marcado por el ambiente. Las gradas se tiñeron de verde y el club decoró el estadio para que el Betis se sintiera en casa, en un día cargado de simbolismo. Más allá del resultado, el partido dejó la certeza de que Lo Celso es el gran referente del equipo en este inicio de curso y que Pau López puede convertirse en una pieza decisiva para consolidar la solidez defensiva.
