
Cuentan que todo comienza con ella. Una pizca de vida resurge de entre aquellos floreados recovecos. Por momentos se expande, en el aire, en una caricia, en un beso y todo tiene su razón de ser. De nombre, polinización.
Patricia Delgado
I
Zumba que te zumba, pequeño bichito gordito. Abejita peludita que relajada vuelas a mi alrededor. ¿De dónde sacaste tanto dulzor? ¿Qué tienen mis flores que te gustan tanto? Gracias por hacerlas crecer más, gracias por dejar que se reproduzcan.
II
Siempre inocente, siempre abejita. Es dulce tu miel y es agradable tu leve zumbar. ¿Por qué tendrían miedo de tan adorable ser? ¿Por qué no te agradecen la existencia misma de la vida? Gracias por expandir nuestros bosques y cultivar nuestras flores. Gracias por tantas fragancias y tanto dulce sabor.
Espectro Errante
Me fascinan las abejas. Me quedo maravillada mientras el insecto rebusca en el interior de la flor, cubierto de polen. Me acerco un poco más para contemplar el milagro de la polinización, entonces siento su aguijón clavarse en mi muslo y me maldigo por entrometida. Ella no entiende de entomólogos.
Calila
I
Así llegaste tú.
Cual abeja a la flor, raíz de la miel.
Cual miel que mi boca endulza.
Cual dulzor, exquisito placer en forma de beso.
Cual beso para alejarte de la hiel.
Tú llegaste así.
II
Llegó la abeja a la flor.
Misión cumplida.
He aquí el ataque más bonito de la naturaleza.
III
Con tus labios cual abeja, picaste los míos, con besos sabor a miel.
De a poquito me polinizaste, con tu encanto, me enamoré.
Y al fin, una colmena me hiciste, mi corazón, en tu hogar, convertiste.
Rocío C Gómez
Observar el fuego, mirar las estrellas, ver cómo una abeja se posa en una flor…Y tu mirada.
Ángel Salgado I
Naturaleza viva,
corre el viento.
Sopla la brisa,
flor en movimiento.
Tus alas agita,
reprime el lamento.
Esboza sonrisa,
es tu momento.
Ángel Salgado II
Mientras sigue en la flor, no estará en la mesa del desayuno… Es el momento.
Ángel Salgado III
¿Era Maya o Amaya?
Ángel Salgado IV
I
El polen viaja como una carta diminuta que busca destinatario entre los pétalos. No hay prisa: la vida florece despacio, como las palabras que una escribe cuando ama el mundo y lo estudia detenidamente, con cariño, letra a letra, con la esperanza de que germine.
II
Entre abejas y le leve brisa, la flor confía. No sabe quién la encontrará, pero abre su corazón igual. Así me siento al escribir: entregando mi esencia al aire, con fe en que alguien, algún día, recoja su néctar de significado. ¿Alguien me lee?
Anita
I
Como las abejas, los discursos van de flor en flor buscando néctar de votos. No quedan ideales, el polen ya no fecunda ideas, sino egos. Y el campo democrático, exhausto, se marchita entre tanto zumbido hueco y tanto fertilizante mediático.
II
Una joven comparte una historia en sus redes sobre Palestina con su correspondiente y menesterosa bandera 🇵🇸 , otro la repite. Y así, de pantalla en pantalla, se esparce la conciencia a día de hoy, a falta de calles inundadas de espíritu. No hay pétalos, pero sí semillas: la empatía debe germinar allá donde el algoritmo no llega.
Nemesio Laverde
I
¿Hay amor en la polinización o las flores de prostituyen?
II
¿Se sentirá Maya traicionada?
Juanma García
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