En el Benito Villamarín, el Betis prolonga su racha imbatible en La Liga, sin conocer la derrota desde el 16 de septiembre, y nadie ha logrado ganar en su fortín durante la temporada 2023/24. En un enfrentamiento contra el Real Madrid, el resultado se mantuvo en un empate 1-1, y la única razón por la cual el equipo de Ancelotti no cayó fue un poste que escupió de manera increíble un testarazo peinado de Isco que habría significado el 2-1.
Pese a que Pellegrini aún no ha vencido al Real Madrid al mando del Betis, con tres victorias madridistas y cuatro empates desde la temporada 2020-21, la serie ‘real’ del Betis refleja un equipo que resulta prácticamente imbatible en La Liga, al menos en suelo español.
En la tarde en el fortín de Heliópolis, el Betis salió con Silva bajo palos, respaldado por Ruibal, Riad, Pezzella y Abner en la defensa. Con la ausencia de Guido, el equipo remodeló su 4-2-3-1, adoptando un 4-4-2 en repliegue. Altimira-Roca formaron la pareja de pivotes béticos, con Ez Abde en la izquierda del trío avanzado entre líneas.
El Real Madrid, bajo la dirección de los Ancelotti, se dispuso en un ‘original’ 4-2-3-1, que podía transformarse en un 4-3-3 en ataque. Aunque la posesión del Madrid rondaba el 65%, el Betis animado, en un momento álgido, logró el empate con un impresionante gol de Ruibal en el minuto 66, nivelando el marcador después de que Bellingham abriera el marcador para el Real Madrid.
El partido se desarrolló con intensidad, y el Betis, desencadenado, casi asegura la victoria con varias ocasiones, incluido un testarazo de Isco que impactó en el poste derecho del arco de Lunin en el minuto 89. Aunque el empate persistió, el Betis, bajo Pellegrini, continúa siendo un equipo difícil de vencer en La Liga, una serie ‘real’ que contrasta con algunas expectativas ideales. El equipo verde y blanco sigue siendo un enigma que desafía las predicciones convencionales.
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