
I
Siempre fue así. El calor y el frío siempre fueron graduales. Poco a poco se alza el sol y nos va calentando. Al igual que al apagarse en el ocaso la tierra se enfría. Poco a poco la arena de la playa deja de quemar y el agua refresca cada vez más.
II
Así llegaste. Como una tormenta que se ve venir. Primero escuchas los truenos y luego sientes la lluvia. Contigo fue igual, primero vi tus esmeraldas brillantes, parpadeantes y mirándome profundas, inconmensurables. Segundo fue tu risa y tus chistes. Después me enamoré de ti y nunca más creo que vaya a olvidarte.
Espectro Errante
Inés acudía a la iglesia todos los días a misa de doce. Pocos se imaginaban que entre la epístola y el evangelio, el cura le dedicaba el salmo gradual. El domingo que le pidió matrimonio, la abuela y yo aplaudimos a rabiar. Los demás repitieron el salmo en sus oraciones.
Calila
I
Lo gradual incomoda: es la paciencia vestida de rutina, la lentitud con la que el mundo se resigna a cambiar. Quien espera lo gradual, quizá nunca vea el desenlace.
II
El hombre teme lo súbito, pero desprecia lo gradual. Y sin embargo, todo lo eterno se forja en silenciosas transiciones.
Nemesio Laverde
I
Ocasiones en que parezco montado en una noria donde lo gradual no gira mientras la vida sigue rotando.
II
Otras, en las que gradualmente avanzas al mismo ritmo de tus latidos.
III
Gradual, aquello que avanza tan despacio que parece que todos están conectados a ello, chupando de tu wifi.
Juanma García
No fue gradual. Aquel amor de verano fue tan intenso que se apagó antes de acabar agosto. Fue precioso, un recuerdo efímero que durará para siempre. No necesitó de segundas partes, no era necesario. Fue amor puro y pasajero, por eso sigue ahí, latente.
Ángel Salgado I
Tu mirada es tan penetrante que no da tiempo a asimilarla y, cuando quieres darte cuenta, ya te ha devorado.
Ángel Salgado II
Las temperaturas bajarán de manera gradual… Pues será en tu ciudad, porque en la mía suben y bajan de sopetón.
Ángel Salgado III
I
El mundo se tiñe de marrón y gris,
por las plazas, terrazas y azoteas.
Gradual, caen las hojas, otoño llega.
II
El abrazo inocente, la risa viva, la mirada furtiva, el beso en la frente.
Cariño gradual, sincero, despierto y paciente.
Llegó para quedarse, bonito y candente.
III
La última tarde cae gradualmente.
Momento mágico hasta el próximo año.
Sientes que va llegando: Otoño, con sus colores tristes.
Rocío C Gómez
I
Gradual fue el modo en que aprendí a quererme. Sin estruendos, sin fuegos, solo con pequeñas victorias que, sin notarlo, me sostuvieron entera.
II
El amanecer siempre llega gradual: primero un respiro azul, luego el dorado que acaricia. Así debería ser la vida, una suma de matices que no duelen.
III
Guarda en su paso la calma del río,
Recorre senderos sin prisa ni ruido,
Alza esperanzas con fuerza sencilla,
Dibuja horizontes que nadie apremia,
Un susurro lento que todo transforma,
Ampara en su curso la esencia del tiempo,
Latiendo despacio, sin miedo al destino.
Anita
Suena Esperanza de María. Esta vez, en un enclave singular, donde el sí quiero toma protagonismo. Cual marcha nupcial, caminan el padre y su niña hacia el altar. De forma gradual, los sentimientos afloran hondo, con lágrimas contenidas. La felicidad mira de soslayo…
Patricia Delgado
La Paz no puede ser gradual.
Porque la guerra tampoco llega poco a poco, nunca.
La Paz debería ser rotunda, exacta, concreta.
La Paz debería ser tan repentina y aplastante cómo la guerra.
La Renacida
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