Regresaba el fultbol a casa y como siempre, minuto de NO silencio homenaje a los sevillistas caídos en el último año bajo los sones de Réquiem del fallecido Bienvenido Puelles. Sentimos no estar de acuerdo con esta práctica; un minuto de silencio es eso, de silencio y Nervión sabe guardarlos como nadie…
Dicho todo lo anterior, nuestro Sevilla saltó al campo con un ambientazo especial y con el siguiente once titular:
Bono – Montiel, Nianzou, Rekik, Acuña – Fernando, Óliver, Jordán – Lamela, Papu Gómez, Rafa Mir.
El equipo saltó al campo con una camiseta homenaje al Tecatito Corona tras su grave lesión de ayer.
Debuta Tanguy Nianzou haciendo pareja de centrales junto a Rekik.
En el primer minuto, Rafa Mir pudo anotar en él área pequeña un gran centro del Huevo Acuña pero la pelota se marcha a la grada.
Destacar la presencia de Oliver Torres en el once titular tras el traspié de la lesión del Tecatito, mandando al Papu nuevamente a la izquierda.
Enfrente, un Real Valladolid con pocas novedades, con Asenjo en portería y aguantando los primeros minutos de dominio sevillista como ya apuntamos anteriormente.
Avanza el tiempo y el dominio prosigue aunque más tímidamente con un Valladolid perdiendo minutos en cada momento y Rekik y Acuña muy expeditivos atrás, rascando si ha de rascar. Cómo debe ser…
En el 30 Rafa Mir se queda solo delante de Asenjo en gran jugada de conjunto y la estrella en los pies de Sergio Asenjo.
Enfrente, Roque Mesa intentando construir algo de fútbol.
Minuto 36 y el run run aparece en la grada. Ritmo pero muy poco fútbol y el Valladolid empieza a tener el balón.
Minuto 40 y destacamos la seriedad atrás de Karim Rekik, sin duda, el mejor de la primera parte.
En el 44, Papu la regala en nuestra área, Tanguy Nianzou no es capaz de despejar y Bono salva la papeleta en clara ocasión de Sergi Guardiola. El sopor del equipo se contagia y empezamos a dormirnos atrás…
El exceso de confianza en el 46 de Asenjo casi nos beneficia y en una jugada de Lamela, casi cayendo, dispara y pega en el palo casi sin querer.
Papu sigue intentándolo sólo; la coge, la amasa, la pisa, Intentar irse de todos y golpear mientras se le va cambiando el rictus su cara…
Concluye la primera parte con el Papu tratando de crear y Rekik expeditivo attas, las ganas de Acuña que se van apagando y la torpeza absoluta en el equipo.
Arranca la segunda parte con dominio sevillista, alguna ocasión sin gran importancia pero con dominio local.
Llegamos al minuto 60 y el marcador sigue 0-0, nada de fútbol.
Hasta el 82, solo cambios de cromos y cero fútbol hasta que anota el Valladolid el primero de los pucelanos. Tragedia. Pero no llega la sangre al río porque Asenjo y el central en una jugada sin peligro la lían y Rekik que pasaba por allí anota a puerta vacía el empate aprovechando el regalo.
Un minuto después, una tangana con los dos equipos implicados acaba con expulsiones en ambos equipos. Acuña ve la tarjeta roja estando ya en el banquillo…
Valladolid mandando en el descuento y un Sevilla triste y anodino sin ganas de ganar, con el sello de un Lopetegui alocado en la banda, como todo el año pasado y parte del anterior. Nada nuevo pues…
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