
Se acabó lo que se daba. Atrás quedó el mercado de fichajes de enero y con él, la posibilidad de incorporar jugadores a un plantel acabado, lleno de pésimos futbolistas.
Se acabó enero y una nueva demostración de la capacidad de los que marcan los designios de la empresa llamada Sevilla FC SAD. No hay más. Para ellos…
Cuarto presupuesto de La Liga, veinte años en Europa, siete UEFA, Supercopas, Copas,… pues solo nos da para largar a un Rakitic acabado a Arabia, a Fernando a Brasil por petición propia y a Gattoni al Anderlech para traernos a un tal Agoumé, a un tal Mejbri y un delantero que pasa la revisión médica en muletas. Aaaah, y a darle ficha del primer equipo a Isaac y Kike Salas.
¿No tienen miedo?
O la ceguera es absoluta o la incapacidad es superlativa. No hay más. Y entre medias, hacen viajar a un delantero del Boavista, Bozenik, para cerrar su pase y una vez en Sevilla no consiguen cerrar el acuerdo y lo mandan de vuelta a Portugal. Luego nos quejamos del trato de los demás clubes pero la broma se cuenta sola.
Y después tenemos el caso de Rafa Mir…
¿Saben lo que más me sorprende? Que Quique no presente la dimisión y se vaya con dignidad. No me creo que esto sea lo que le prometieron cuando firmó. Pero claro, estaba en su casa y supuestamente le están pagando… maldito dinero.
Maldito dinero que nos llevarán al ostracismo pero queréis un Sevilla en manos de los sevillistas y ahí tenéis las consecuencias. Ser sevillista no te da cualidades para mandar y dirigir una empresa de esta envergadura. Pero da igual…
No diré lo de recen, como dice Del Nido, máximo accionista del club, no, pero que o ganamos al Rayo o… se vienen curvas y nos jugamos las papas con los fichajes de un francés de 20 años que no ha jugado en ningún sitio, un tunecino de 20 años que ha jugado tres ratitos en la Premier y que en otro, ha conseguido encabronar a Mariano en un entrenamiento con el posterior ¿castigo? y un delantero argentino que llega en muletas y del que se desconoce si jugará en los 4 meses que va a estar por aquí.
Pero bueno, dicen que nunca se rinde así que quiero terminar siendo positivo y aferrarnos a Isaac, el único que ha demostrado ser diferencial en un equipo plano donde no hay más.

Deja una respuesta