
Nuestra frase carnavalesca con la que resumimos el libro
«Mi cuerpo emprende el viaje
Pero mi corazón y mi alma
Ni pueden
Ni quieren soltarse»
Los Encaidenaos, Kike Remolino, 2020
Ficha técnica
– Autor: Ismael López.
– Título de la obra: La piedad del leviatán.
– Editorial: Loto Azul Editorial (Olé Libros).
– Fecha de publicación: Junio de 2023.
– Número de páginas: 76.
El autor
Ismael López, (La Carolina, Jaén; 1990), es graduado en Filología Hispánica por la Universidad de Córdoba, ensayista y autor de poemarios como Las 88 páginas de mi libreta (2019), Érase una vez poesía (2020), y Del mito al Eros (2022). Además, es asesor lingüístico, corrector profesional acreditado por Cálamo & Cran y la Universidad Europea e investigador literario e ilustrador. Hoy reseñamos su última obra: La piedad del leviatán.
Valoración
Con unos estupendos versos, Ismael López nos transporta al mundo de la poesía con la que desarrolla su pensamiento, conformado a partir de su formación como literato basado en las lecciones de autores clásicos y otros más modernos, como H. Melville y W. Whitman, y su fascinación por la mitología griega. Teniendo en cuenta estos tres parámetros, y tras la lectura de esta obra, podemos establecer hasta tres bloques temáticos dentro de la misma, a saber:
En primer lugar, nos encontraríamos poemas dedicados a la crítica de la sociedad capitalista, las guerras, a los poderosos, e incluso poemas críticos dedicados al olvido del pasado, debido a lo cual nos olvidamos de nuestras raíces. Es interesante cómo, aun inspirándose en autores helenos, teniendo en cuenta lo que dijeron, la crítica se presenta tan actual. Nos hace preguntarnos: ¿Estará ya todo inventado, como se suele decir? ¿Será que la sociedad sigue cometiendo los mismos fallos? Sin duda, si son tan actuales estos poemas-críticas será por algo.
Un segundo bloque estaría conformado por los poemas dedicados al mundo de las Humanidades, las cuales son claves para cubrir nuestra necesidad de autoconocimiento y reflexión. Es por ello que el autor manifiesta una clara defensa de la lectura de los libros clásicos y, en específico, de la poesía sobre los actuales best-sellers. Claramente, la buena acción de las Humanidades, el saber llevarlas a cabo e introducirlas en el estudio de la sociedad, hacen posible que, en este caso la literatura, sea una base sin igual para entenderla, sus cambios y transformaciones; su pasado, su presente y su futuro.
Igual que el autor se pregunta, y nos hace entender que la poesía está herida de muerte, yo como humanista me sigo preguntando: ¿Por qué las Humanidades no tienen tanta cabida en el mundo como otras ciencias? ¿Por qué no les damos su lugar y comenzamos a mirarlas como auténticas ciencias para conocer a la sociedad, pues para ello es que están conformadas? Creedme: Leer no es solo sentarse y leer sin más. Ya vemos que la poesía, una de las Humanidades, es básica para entendernos y progresar en los demás ámbitos.
Por último, en el tercer bloque de poemas nos centramos en un ámbito más personal del propio autor. En este, López expone su propia necesidad de expresarse como poeta, y por ello le escribe al amor, a sus lugares de nacimiento y residencia, al paso del tiempo, a la muerte e, incluso podemos decir, a su propio triunfo en el sector editorial como autor. Sin duda, es uno de los bloques más esperados por todos los asiduos a la poesía, pues nos da claras muestras del pensamiento del autor que tenemos entre manos, además de ser algunos de los versos con los que más identificados nos podemos sentir. Hallamos aquí al autor que se abre en cuerpo y alma para su obra, sufrimos con él sus poemas de desconsuelo y celebramos sus alegrías y triunfos.
Si una de las metas del autor es que le dediquemos un rato de nuestro tiempo al autoconocimiento y la autorreflexión crítica, además de disfrutar de su escritura, con este libro lo ha conseguido. Es una obra muy completa, bien estructurada, que no deja nada en el tintero, fácil de leer, ¡y con ilustraciones del propio autor!
En cuanto a los poemas que más me han gustado, podría tener que enumerarlos todos, pues el vocabulario y la forma de componer del autor es una maravilla. No obstante, os diré mis cuatro favoritos: La risa, Buenas razones, Queequeg, y El refugio de la verdad.
Versos que me han gustado:
«Prepara el óbolo de Caronte / que estamos a merced / de la piedad de los impíos»
«Su refugio está en el ruido / lejos de la muerte, / a espaldas del diálogo / interno»
«Por si acaso, / te espero donde los libros, / allí donde la palabra vale más que el autor»
«La fuerza del índice que apunta / expone la debilidad de la autocrítica»
