
Cierro los ojos y voy contando: uno… Dos… Tres…
La familia crece y las ganas merman, vamos aprendiendo a sumar momentos y a restar energía.
Miguel recuerda su niñez, Nancy en la adolescencia y Jesús aprendiendo a andar… Sumamos y sumamos que mañana quizá ya no estamos.
Manuela Sánchez
Estaba claro que tanto sumar acabaría restando.
Ángel Salgado I
Sumar, por ti, sumé.
Mientras todo se dividía.
Restar, por mí, resté.
Cuando ya multiplicar no podía.
Ángel Salgado II
Era todo tan idílico, que solo tu mirada podía aportar más belleza al momento.
Ángel Salgado III
Siempre negatifo, nunca positifo…
(Louis Van Gaal)
Ángel Salgado IV
I
Sumar nunca será algo parecido a restar. Sumar es un arte vibrante, es tejer alianzas, es un hilo constante.
Sumar es no tener competencia, ni callar la voz, es crecer juntas, dejando atrás el “yo”
e ir creando un “nos”. Sumar es fuerza, un saber antiguo, cambiar el mundo, siempre contigo. Siempre juntas.
II
El ábaco, voces de mentes brillantes del pasado que retumban, que traduce el caos en armonía numérica. Cada cuenta deslizada simboliza el orden nacido del pensamiento; suma tras suma, la materia se tiene al infinito, convirtiendo números en lenguaje eterno.
III
Sembrar: sumar no es acumular
Unión: construir juntos nuevos caminos.
Metas: pasear de la mano por esos caminos.
Alianzas irrompibles e incorruptibles de excelente resultado.
Resultados: la moraleja matemática que obtienes al sembrar unidos creando alianzas que te lleven a grandes metas.
Anita
Al colegio llegó un sustituto que nos enseñó a sumar con los dedos y a multiplicar con los nudillos. Nos explicaba ciencias en el parque y geografía con mapas. Sus métodos no fueron aprobados. Después de vacaciones volvimos a los ordenadores, pero algo había cambiado en nuestra imaginación.
Calila
Un “buenos días” de lunes, un “esto está hecho”, un “no te preocupes, todo irá bien”, un abrazo sin esperarlo, una sonrisa cómplice, un “choca esos cincos”, una quedada de amigos, se trata de sumar, simplemente sumar…
Patricia Delgado
En la sociedad actual, sumar se ha deformado en, y con una voracidad cuantitativa: acumular bienes, seguidores, títulos. Nos olvidamos que sumar implica construir, no competir; aportar, no agotar. Es un cálculo vacío, donde el yo se multiplica y el nosotros se resta, dejando en saldo, un vacío disfrazado de felicidad.
Nemesio Laverde
Venía contando, desde la plaza, lo que había gastado.
Al terminar de sumar se santiguó por lo que le había costado la carne y el pescado que llevaba en la bolsa.
«Piedras, terminaremos comiendo piedras…», pensó para sus adentros.
La Renacida
I
Siempre sumar. Restar solo si es preciso por salud mental.
II
Multiplicar siempre será una gran suma y así, acelerar y acelerar…
III
Os confieso que jamás utilicé un ábaco.
Juanma García
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